¿Me amas?, fue la pregunta que me hizo Marisol, No se, desconozco el significado de la palabra, me puedes decir tú que entiendes, es como sentir mariposas en el estomago, lograr la felicidad si la otra persona es feliz y un par de frases telenovelescas más, fue la respuesta que obtuve, la mire fijamente y solté una carcajada, esos son cuentos, invenciones la realidad es diferente, así se lo dije, su mirada fue de reproche, frunció el entrecejo y abulto los cachetes que tomaron un color mas rosado, “te odio” y levanto la mano para darme una cachetada, otra situación telenovelesca, la detuve a tiempo antes de que hiciera blanco, es la parte que mas le reprochaba, la explosión agresiva como respuesta a toda discusión donde no fuera ella la triunfadora, aproveche el movimiento y el impulso de la mano para hacerla girar y la rodie con los brazos para sujetarla, le apoye la barbilla sobre le hombro de forma que pudiera susurrarle al oído. Me gustas y hay paz interior cuando estoy contigo le dije, no me pidas más, estoy desprovisto de frases cursis, el 14 de Febrero se invento por mercadotecnia, los peluches son una mamada, el corazón es un órgano su función es recircular la sangre y no piensa y no esta comprobado físicamente que exista el alma. Solo conozco a Alma L. y esta de 10. Las historias románticas que te vende la televisión, que están en un libro, no existen, son la formula que te garantiza las ventas o la audiencia.
La conocí hace un par de meses, fue una grata confusión, tenia cita con una amiga, cuando llegue al lugar la mire por la espalda, la encontré parecida por tanto me acerque y la tome por los hombros, cuado giro me di cuenta de mi gran error, disculpe la confundí no era mi intención asustarla, después del periodo de desconcierto que tardo poco mas de 1 minuto, y me sonrío, no te preocupes no pasa nada, fue su respuesta. Alentado por su respuesta, me presente y le explique a mas detalle el por que de mi error, creo que no me creyó pero tampoco me dijo lo contrario, le explique el por que estaba ahí y otras tantas cosas, el tiempo paso demasiado rápido al revisar el reloj había transcurrido cerca de 1 hora. Finalmente me despedí, mi citada no se presento, así se lo comente me levante, me despedí. De manera inesperada me pido el numero de Celular, para concertar una cita en forma me dijo, no estoy seguro soy una persona con muchos defectos, mis sentimientos poco los entiendo así que es difícil expresarlos, créeme no te lo recomiendo, sobre advertencia no hay engaño, el buzón esta cerrado para reclamaciones. Aun así se lo pase, no espere recibir llamado pero así fue, fijamos el día, la hora y el lugar.
Sábado 6:00 P.m., en el mismo parque, llegue un poco antes, la verdad estaba ansioso hacia mas de 6 meses que había terminado con mi pareja y necesitaba liberar tensión, al llegar el clásico saludo, beso de cachete, no le calcule bien y fue muy cerca de la boca, disfrute a medias de sus labios, no objeto nada, esto era alentador, recurrí a mis ahorros, platicamos durante un rato y la invite a cenar, ya durante la platica me comento de su ultima pareja como fue y por que terminó, durante todo el rato la escuche y no me atreví a cuestionarla por momentos parecía que soltaría el llanto, en resumen fue que tenían 5 años de pareja, le entrego su virginidad y la engaño. No me extrañó yo repetidas veces lo hice. De esta manera transcurrieron 3 horas ya sobre las 9:00 P.m. parecía que todo terminaría, ya en el taxi su proximidad fue sugerente así, que tome la iniciativa, le tome la cara con ambas manos y le di un beso, fue como me lo imagine durante el saludo, me compartió su calor y nuestras lenguas se encontraron, fue apasionado y duradero. No había lugar a dudas, le indique al chofer el cambio de dirección, por el rabillo del ojo pude observar la sonrisa que esbozo, este gesto me indigno en gran medida, que derecho se le otorgo para espiar nuestra intimidad, de no ser por ella que con un segundo beso me distrajo le hubiera hecho bronca, el transcurso fue de besos y caricias, que me permitieron conocer con detalle sus formas, unos senos redondos y firmes bien proporcionados, su cuerpo es “llenito” de forma general, nada exagerado, no llegue ha conocer su intimidad esta la deje para la habitación. Llegamos, le pague al chofer y evite mirarlo a la cara, un gesto y le plantaría pleito y seguro ahí terminaría la noche para Marisol y yo.
Ya en el mostrador nos atendió e indico habitación, no hacía falta ya conocía la distribución, el empleado busco con una mirada libidinosa a Marisol, por lo que me obligo a colocarme frente a ella y plantarle cara al tipo, se hizo pendejo y clavo en su revista, la habitación era sencilla pero muy limpia y ordenada, una cama, tocador y una pequeña mesa eran todo lo que constituía el mobiliario, me senté sobre la cama y la invite a sentarse a mi lado, la notaba nerviosa pero aun así accedió, la abrase y le murmure no se que cosa y lo termine con un pequeña mordida en la oreja, nada agresivo. La note aun más nerviosa por lo que decidí que no seria esa la noche. Por lo que la rodie nuevamente y la acosté en la cama, sin ningún movimiento que indicara que la estaba forzando, ella se relajo. Así terminamos esa noche ella de espadas a mi y yo abrazándola en posición semi-fetal cada quien lidiando con su culpas y remordimientos, me di cuanta que esa invitación era venganza, no hay duda, ya que semanas después ella misma lo confirmo. Al salir se intento disculpar, pero me negué rotundamente no hay nada que disculpar, la acompañe a su casa y de ahí me dirigí a la mía.
Un par de semanas después el resultado no fue el mismo, fue de placer sin limite, la habitación se no hizo pequeña, la pasión se desbordo, disfrute de cada centímetro de su piel, probé de su feminidad, me adentre en su ser, la sincronización fue maravillosa, manteníamos el mismo ritmo, la imaginación siempre presente, la prueba de nuevas posturas, el revoltijo de sabanas en la cama y gran parte del suelo no teníamos fronteras unas veces arriba otras abajo, ella marcaba el ritmo otras tantas yo, este fue el fin de todas las citas durante los primeros meses, pero como siempre el placer no lo es todo, termina por ser parte de la relación y se pierde lo excitante, comenzamos a mostrar y hacer evidentes las manías, miedos y frustraciones, la armonía se comenzó a fracturar, el sexo ya no era suficiente. Durante los últimos meses los encuentros fueron menos y su final el mismo, riñas. Si terminábamos en la cama los disfrutábamos al 100%, el sexo siempre fue maravillo, pero al final nos vestíamos y salíamos de la habitación tomando caminos separados. No soy bueno en compartir mis emociones, tal ves esto fue la grieta mayor en la ya deteriorada unión que manteníamos, el final lo vi inevitable, aun así no trate de remediarlo, nunca correspondí a sus muestras de afecto, no fui capaz de regresarle el te quiero o te amo, siempre fue bye. Recuerdo la última vez. Ella me pidió que le dijera cuanto la amaba, su mirada era anhelante deseosa de escucharlo, si me lo dices te esperare por la eternidad, así me lo dijo, es la parte que no me gustaba, siempre salía a relucir una frase telenovelera, mi respuesta no la escucho, simplemente me quede callado y trate de abrazarla, lo rechazo y se alejo. Solo escuche un sollozo. Fue la última vez que la escuche y la vi y solo atine a decirle hasta luego.
Al pasar frente al hotel, su recuerdo me taladra la mente y me siento vacío, si le hubiera dicho lo que sentía, pero era imposible aun hoy no encuentro la forma, otras prefiero evitar la ruta, solo una vez más he visitado el hotel pero no lo soporte, al pasar por la habitación en otras ocasiones compartida con Marisol su recuerdo se ancló en mi cabeza y me sentí solo y no es una sensación que disfrute, así que decidí buscar uno mas. No se de ella, no guarde su numero, sabia que llegaría a este punto y me seria imposible soportar la tentación. He pensado en visitar su casa pero me abstengo puede ser que lo que encuentre no sea lo que busque, además si me preguntará si la amo, no tendría la respuesta. Soy incapaz de decir lo que siento. Cuando averigüe la forma tal ves la busque y le diga lo que sentía, no por continuar donde terminamos esto es imposible, si no para demostrarle cuanto disfrute el estar con ella y compartir mi dicha con ella, que significo algo muy hermoso y lo tengo guardado bajo llave, como mi gran tesoro.
La conocí hace un par de meses, fue una grata confusión, tenia cita con una amiga, cuando llegue al lugar la mire por la espalda, la encontré parecida por tanto me acerque y la tome por los hombros, cuado giro me di cuenta de mi gran error, disculpe la confundí no era mi intención asustarla, después del periodo de desconcierto que tardo poco mas de 1 minuto, y me sonrío, no te preocupes no pasa nada, fue su respuesta. Alentado por su respuesta, me presente y le explique a mas detalle el por que de mi error, creo que no me creyó pero tampoco me dijo lo contrario, le explique el por que estaba ahí y otras tantas cosas, el tiempo paso demasiado rápido al revisar el reloj había transcurrido cerca de 1 hora. Finalmente me despedí, mi citada no se presento, así se lo comente me levante, me despedí. De manera inesperada me pido el numero de Celular, para concertar una cita en forma me dijo, no estoy seguro soy una persona con muchos defectos, mis sentimientos poco los entiendo así que es difícil expresarlos, créeme no te lo recomiendo, sobre advertencia no hay engaño, el buzón esta cerrado para reclamaciones. Aun así se lo pase, no espere recibir llamado pero así fue, fijamos el día, la hora y el lugar.
Sábado 6:00 P.m., en el mismo parque, llegue un poco antes, la verdad estaba ansioso hacia mas de 6 meses que había terminado con mi pareja y necesitaba liberar tensión, al llegar el clásico saludo, beso de cachete, no le calcule bien y fue muy cerca de la boca, disfrute a medias de sus labios, no objeto nada, esto era alentador, recurrí a mis ahorros, platicamos durante un rato y la invite a cenar, ya durante la platica me comento de su ultima pareja como fue y por que terminó, durante todo el rato la escuche y no me atreví a cuestionarla por momentos parecía que soltaría el llanto, en resumen fue que tenían 5 años de pareja, le entrego su virginidad y la engaño. No me extrañó yo repetidas veces lo hice. De esta manera transcurrieron 3 horas ya sobre las 9:00 P.m. parecía que todo terminaría, ya en el taxi su proximidad fue sugerente así, que tome la iniciativa, le tome la cara con ambas manos y le di un beso, fue como me lo imagine durante el saludo, me compartió su calor y nuestras lenguas se encontraron, fue apasionado y duradero. No había lugar a dudas, le indique al chofer el cambio de dirección, por el rabillo del ojo pude observar la sonrisa que esbozo, este gesto me indigno en gran medida, que derecho se le otorgo para espiar nuestra intimidad, de no ser por ella que con un segundo beso me distrajo le hubiera hecho bronca, el transcurso fue de besos y caricias, que me permitieron conocer con detalle sus formas, unos senos redondos y firmes bien proporcionados, su cuerpo es “llenito” de forma general, nada exagerado, no llegue ha conocer su intimidad esta la deje para la habitación. Llegamos, le pague al chofer y evite mirarlo a la cara, un gesto y le plantaría pleito y seguro ahí terminaría la noche para Marisol y yo.
Ya en el mostrador nos atendió e indico habitación, no hacía falta ya conocía la distribución, el empleado busco con una mirada libidinosa a Marisol, por lo que me obligo a colocarme frente a ella y plantarle cara al tipo, se hizo pendejo y clavo en su revista, la habitación era sencilla pero muy limpia y ordenada, una cama, tocador y una pequeña mesa eran todo lo que constituía el mobiliario, me senté sobre la cama y la invite a sentarse a mi lado, la notaba nerviosa pero aun así accedió, la abrase y le murmure no se que cosa y lo termine con un pequeña mordida en la oreja, nada agresivo. La note aun más nerviosa por lo que decidí que no seria esa la noche. Por lo que la rodie nuevamente y la acosté en la cama, sin ningún movimiento que indicara que la estaba forzando, ella se relajo. Así terminamos esa noche ella de espadas a mi y yo abrazándola en posición semi-fetal cada quien lidiando con su culpas y remordimientos, me di cuanta que esa invitación era venganza, no hay duda, ya que semanas después ella misma lo confirmo. Al salir se intento disculpar, pero me negué rotundamente no hay nada que disculpar, la acompañe a su casa y de ahí me dirigí a la mía.
Un par de semanas después el resultado no fue el mismo, fue de placer sin limite, la habitación se no hizo pequeña, la pasión se desbordo, disfrute de cada centímetro de su piel, probé de su feminidad, me adentre en su ser, la sincronización fue maravillosa, manteníamos el mismo ritmo, la imaginación siempre presente, la prueba de nuevas posturas, el revoltijo de sabanas en la cama y gran parte del suelo no teníamos fronteras unas veces arriba otras abajo, ella marcaba el ritmo otras tantas yo, este fue el fin de todas las citas durante los primeros meses, pero como siempre el placer no lo es todo, termina por ser parte de la relación y se pierde lo excitante, comenzamos a mostrar y hacer evidentes las manías, miedos y frustraciones, la armonía se comenzó a fracturar, el sexo ya no era suficiente. Durante los últimos meses los encuentros fueron menos y su final el mismo, riñas. Si terminábamos en la cama los disfrutábamos al 100%, el sexo siempre fue maravillo, pero al final nos vestíamos y salíamos de la habitación tomando caminos separados. No soy bueno en compartir mis emociones, tal ves esto fue la grieta mayor en la ya deteriorada unión que manteníamos, el final lo vi inevitable, aun así no trate de remediarlo, nunca correspondí a sus muestras de afecto, no fui capaz de regresarle el te quiero o te amo, siempre fue bye. Recuerdo la última vez. Ella me pidió que le dijera cuanto la amaba, su mirada era anhelante deseosa de escucharlo, si me lo dices te esperare por la eternidad, así me lo dijo, es la parte que no me gustaba, siempre salía a relucir una frase telenovelera, mi respuesta no la escucho, simplemente me quede callado y trate de abrazarla, lo rechazo y se alejo. Solo escuche un sollozo. Fue la última vez que la escuche y la vi y solo atine a decirle hasta luego.
Al pasar frente al hotel, su recuerdo me taladra la mente y me siento vacío, si le hubiera dicho lo que sentía, pero era imposible aun hoy no encuentro la forma, otras prefiero evitar la ruta, solo una vez más he visitado el hotel pero no lo soporte, al pasar por la habitación en otras ocasiones compartida con Marisol su recuerdo se ancló en mi cabeza y me sentí solo y no es una sensación que disfrute, así que decidí buscar uno mas. No se de ella, no guarde su numero, sabia que llegaría a este punto y me seria imposible soportar la tentación. He pensado en visitar su casa pero me abstengo puede ser que lo que encuentre no sea lo que busque, además si me preguntará si la amo, no tendría la respuesta. Soy incapaz de decir lo que siento. Cuando averigüe la forma tal ves la busque y le diga lo que sentía, no por continuar donde terminamos esto es imposible, si no para demostrarle cuanto disfrute el estar con ella y compartir mi dicha con ella, que significo algo muy hermoso y lo tengo guardado bajo llave, como mi gran tesoro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario